Brazas de paz
Ágata, una jovencita de 14
años, se sentó en la cera, quizá algo enojada, su mirada se perdió en el
infinito. Su adolescencia le revuelca la
vida, pero quizá no como a todos los jóvenes de su edad, o si?
Perdida en sus pensamientos Ágata
busca soluciones, primero se enoja con los “feos malhechores” luego piensa:
mejor gritarle al gobierno y reclamarle;
sus lágrimas salen apresuradamente por sus ojos, un porque corta su
respiración, era su padre, el suyo, como en cada asesinato es el familiar de
alguien, esta vez, su padre, varios hombres, por robarle lo mataron; le
quitaron no solo el dinero si no la vida, pensaba Ágata en los hijos de tantos
hombres que han muerto en las guerras, por la delincuencia, ellos también la
han pasado mal y su corazón se arruga, ya ha pasado un año, empuña sus manos
con rabia, quisieran que ellos también murieran, los asesinos de mi padre y
sale corriendo con rabia, entra a su casa, se tira en la cama y golpea con
todas sus fuerzas, hasta quedar agotada, ella siente que se abre la cama y se
la traga.
Adentro no hay negro ni
blanco, todo es un hermoso campo de matices, no siente más rabia, tampoco
dolor, ni alegría, es solo tranquilidad. Un ser se acerca y la toma de la mano,
viste de gris y toda su piel es de colores, le dice acompáñame, quiero mostrarte
algo, llevo a Ágata a un gran poso, donde en sus aguas puedes ver lo que
necesitas ver, vio la vida de su padre, vio su infancia, como un hermano de su
padre fue asesinado, vio también el día de su muerte, y como el ser vestido de
gris abrazo a esos hombres que mataron a su padre, era él, aun así no pudo
juzgarlo, todo estaba lleno de color, de vida, su padre no tenía dolor, era
incomprensible, Ágata miro al ser multicolor y le dijo: quién eres? Él sonríe y
le dice soy la energía asesina, ella lo mira, porque tienes tanto color si eres
tan malo?
El la mira y le dice yo solo abrazo a quien le corresponde asumir
el destino de llevar vida desde el dolor y lo llevo a quien requiere reaccionar
o simplemente ya necesita partir, no por su decisión, si no por que le
corresponde dejar una gran fuerza en su familia. Ágata no comprende, sus
palabras no incrementan su rabia. El colorido personaje mira quizá leyendo sus
pensamientos; mira mis colores, cada color depende de la manifestación necesaria,
para que los seres que se queden en la vida, o para dejar la fuerza que
necesita la familia, solo que algunos no la toman, ahí si le duele a quien
sacrificó su vida, pues su sacrificio sería en vano, mira ahí va la energía de
sacrificio, y saluda a Ágata esta
extrañada la mira y mueve su mano y pregunta por qué tiene traje verde? su traje es por su función ella siempre lleva
esperanza, por eso se encarga de acompañar los actos que no han sido vistos.
Ágata mira a su extraño acompañante
y le dice y las guerras? Mira halla esta, se ve un ser multiforme, cara de roca,
pecho de metal, manos de palo, pernas de serrucho, con camisa oxidada y
pantalón brillante, al lado su gestor el ego un ser con cabeza de globo, camisa
roja llamativa, es pequeño pero su cabeza es muy grande y de la mano lleva
siempre una caja parlante el juzgamiento, todo lo repara los juzga, lo etiqueta
de bueno o malo, de agradable o desagradable, mira vez ese gusano grande que se
sube a ego?, es la soberbia, ellos son la fuente de las guerras, mira viene
ego, ignorémoslo, me pone a trabajar, y la gran voluntad no ha dicho que
requiera mis servicios, él engaña el corazón con todos sus argumentos, saca un
silbato y sopla, llega automáticamente algo parecido al aire con una cabeza de
muchas caras y le dice a Ágata abrásalo y respíralo, si tomas la vida así con
todo él no puede enredarte con argumentos tontos, ego con soberbia a su espalda
hablaba y hablaba pero ni Ágata ni su nuevo a migo lograban involucrarse, así
que se marchó, Ágata dijo esa era la vida?, la vida tiene muchas caras, y no
todas son digamos lindas, si puedes respirarla tomarla así como es, se
convierte en un gran antídoto para muchas energías, pues cuando integras la
vida, con todo lo que hay, personajes como el pierden poder. Lo que te acabo de
dar es un atajo, pero debes hacerlo de verdad, Ágata si tu corazón está en paz
no hay espacio para la guerra.
Con que peleas tu Ágata?
La energía multicolor
chasquea los dedos y se ven frente a una gran casa acorazonada, y le dice, este
es tu corazón, entra dale una hojeada, ella le dice por que no entras? Y el
responde, porque no estoy invitado en tu corazón, recuerda que peleabas con
migo, por la guerra, los malos, la muerte de tu padre.
Ágata entra y ve un caos de
emociones, al mirar por las ventanas veía los sacrificios de sus antepasados,
el dolor de las víctimas, los victimarios… dentro solo tristeza, rabia, tenía
que hacer algo así que tomo fuerza del amor de su padre y abrió las puertas
para que todos ingresaran, por primera vez los mira a los ojos, mira su
historia, y la de sus ancestros, nuestra anfitriona abraza a energía asesina
integrándola en ese instante la calidez de su corazón y su mirada benevolente
hace que todos se abrasen.
En su habitación su madre y un
amigo de su padre trataban de despertarla. Ya no necesito llorar más expresa,
si estamos bien, también papá lo estará, después de un silencio…Ágata es muy
sabia, quien partió estará en paz en sus corazones si sus corazones están en
paz, dijo el amigo de du padre.
