Ira blanca
Quisiera, con el mismo pañuelo que seco tus lágrimas,
atar las manos del ser que las provoca.
Porque hay una ira necesaria,
una ira que equilibra la justicia etérea
que rige los designios del espectro mas débil de la humanidad.
una ira de venganza blanca,
que solo pretende aliviar el dolor de la herida
y garantizar la defensa del inocente…
exclavizado, inexorablemente, por su propia ignorancia.