El derecho a la vida.
¡Qué bien se está aquí! Calentita y protegida, soy tan poca cosa aún, pero estoy viva y siento como voy creciendo.
Aún no tengo forma, pero poco a poco se me van a formar los brazos, las piernas, los dedos, los ojos,
¿de qué color serán mis ojos? Todavía no se puede saber, pero con ellos veré tu sonrisa y tu cara de madre que
siempre cuidará de mí, porque tú eres mi madre, y una madre es esa persona que vela por ti y nunca dejará que
nada malo te pase, por eso me siento tan bien aquí, dentro de ti, mamá.
Voy a necesitarte tanto, voy a depender tanto de ti, pero yo te pagaré con mí sonrisa, mis abrazos y mil besos.
Cuando salga, me tendrás que enseñar a andar, a hablar y hasta a montar en bici, ¿Ves? ¡Cuánto voy a depender de ti!
Mamá déjame nacer y crecer, mamá, ¿Qué pasa? mamá, mamá, mamaaa…