La danza del fuego

La danza del fuego

Y aunque las llamas
calcinaban

Las plantas de mis pies,

No me inmuté

Porque la vida es efímera

Y por eso todos lo somos.

Así que ignoré el ardor

Que mi cuerpo recorría

Y dancé al ritmo de la
fugacidad

Bailé, sobre las llamas que
flagraban debajo de mí

No las apagué,

No hay necesidad

Las sentí, las volví parte
de mí

Las abracé así como ellas me
abrasaban a mí

Aguardé con ansias el
comienzo del fin,

Y el final del inicio

Recibí entre brazos a la
muerte, mi vieja amiga

Estreché su mano y me fui
con ella

A un lugar lejano, donde yo
podría bailar,

Eternamente entre flamas
radiantes,

Una melodía incesante

Bailar gustosa,

La danza del fuego




  • 0 Comentarios

    Dejar una respuesta

    Contacto

    info@scriboeditorial.com
    666 47 92 74

    Envío
    o de las

    Inicia Sesión

    o    

    ¿Ha olvidado sus datos?