Multicolor
No…lo cierto es que ha llegado un punto en el que el mundo ha cambiado tanto que quizá he perdido el rumbo o he dejado de entenderlo con los años…y no, no me niego a entenderlo, he hecho uso de conciencia y he determinado que la edad es un número pero que a ese número van unidos cientos de cosas.
Cuando tienes 3 años te asusta el lobo feroz y te ilusiona ver un monstruo con el pelo rosa pero cuando eres adulto y sobretodo si eres mujer lo que buscas es a ese lobo feroz que tenga grandes dientes capaces de arrancarte la ropa a tiras y devorarte sin pensarlo dos veces, y el monstruo del pelo rosa…bueno…esa es tu amiga que se tiñe mensualmente tan sólo para disimular las canas.
Cuando eres un niño no quieres dormir sólo…estar entre los brazos de mamá te parece el lugar más seguro del mundo. Te asusta la oscuridad y dormir es una pérdida de tiempo que te quita momentos de diversión con tus juguetes y muñecos. Sin embargo cuando creces se enciende un instinto en nuestro interior que desea que mamá tenga algo que hacer y te deje la casa para ti solito. La oscuridad se convierte en el lugar donde vas a jugar y los juguetes… cambian a modo vibración si es que te falta¡un buen lobo feroz!
Si eres un niño y tienes una educación “antigua ”te enseñan que todos tenemos una mamá y un papá, que las chicas llevan el pelo largo, vestidos y coletas de color rosa y los chicos llevan el logo de Nike en sus gorras de machotes, el azul como bandera, los coches y las motos como única diversión y el fútbol como deporte obligado, es algo así como la canción: los chicos con las chicas ¡deben estar!
Yo, a mi edad lo que veo son mujeres con dos pares de ovarios que llevan vaqueros ajustados y chaqueta de camuflaje, chicos que se depilan más que nosotras y carrozas llenas de gente que grita y baila en un mundo multicolor.
Veo familias felices con dos mamas o dos papas, mujeres que se cortaron el pelo y se dieron cuenta que ese dios al que otros rezan les puso en el cuerpo equivocado y hombres que se hormonan para reconocerse cuando se miran en el espejo.
Hoy veo un mundo en el que un padre pide a gritos poder ver a su hijo porque el divorcio hizo que lo tenga a su lado una vez cada 15 días y otro que tiene todas las opciones para pasar tiempo con su bebé y decide quedarse en casa con un millón de excusas que no se cree ni él y abandonar a su pequeño, que con los años entenderá que estaba mejor sin él.
Vivo en ese mundo… he aprendido a moverme a su ritmo, a estar cómoda con cualquiera de las opciones, tanto las de los demás como las mías propias y decidí… decidí quedarme con aquello que me hiciera feliz, le pesase a quien le pesase…
Vivimos una parte de nuestra vida con hombres que rompen cada pedazo de nosotros, no eran lobos feroces sino críos de gorra girada, con otros pocos que creían ser nuestra alma gemela solo con mirarte a los ojos y alguno hasta nos titulan como su mujer por una noche de sexo… ¡se me eriza la piel de pensarlo!
Existen momentos de duelo,de rupturas dolorosas, de relaciones tóxicas con las personas equivocadas y decisiones tomadas a destiempo, de todo se sale, agarras tus bártulos… te secas las lagrimas, media vuelta y se acabó..
Hay momentos de desvelo, desgarro interno y noches de sexo con desconocidos que tapan huecos en un corazón vacío sediento por sentir algo… noches de pantalla y móvil recalentados con conversaciones ficticias llevadas a un alto nivel del sexo más inapropiado y a la vez consolador…
Lo cierto es que tenemos la opción de elegir; hombre, mujer, transexual y toda la gama de gustos posibles… ya no es sólo el tópico de: alto, moreno y fibroso o la chica Barbie que nos impusieron cuando éramos canijos.
Ahora, al igual que la bandera multicolor, las opciones han aumentado. Algunos se decantan por lo fácil, ese que tiene buen sueldo… o aquella que tiene buen culo y un pecho grande en el que dormir la siesta. Así de fácil lo ponen. Otros por el contrario buscan aquello imposible, como si lo difícil se plantease como un reto, algo que conseguir, un trofeo del que después presumir. O igual nos da por engancharnos a un amor platónico, no… no es lo mismo que la opción anterior, el sujeto en cuestión sabe que esa persona es inalcanzable, sin embargo se embauca en una relación unitaria con la imagen angelical del otro…
¿Es amor? ¿Cuánto dura? Puede existir ese tipo de amor durante toda una vida?
Por suerte para algunos y casi como alergia para otros, existe un tipo de decisión que no tomamos y es la de enamorarnos porque sí y de quien sea… de cualquier sexo, sin importar su bolsillo ni su físico, es como si todo se concentrase en un: ¡me gusta! y ¡no se por qué!Parece bonito ¿verdad? Puede serlo si esto de lo que hablo es mutuo…
Existe ese tipo de enamoramiento, no es un cuento…pasa como desapercibido al principio pero como las flores cuando se cuidan con dedicación, crecen fuertes y con colores muy llamativos,de esos…que se incrustan en el alma y por más que luches contra tu cabeza no puedes sacarlo, tratas de hacer cosas diferentes a lo habitual para olvidar esa sensación que te invade… cocinas, sales a correr, quedas con amigos, duermes… ¡y mucho!
Hablas con otros u otras chicas… así se me pasará, te dices…
¡Imbécil! ¡la has cagado…has mirado a los ojos del destino, le has echado un órdago y no se lo ha tragado! ¿Ahora qué?
Pues… tienes dos opciones; dejar que el tiempo pase y ponerte morado de todo aquello que cocinaste o… ¡ponerte cuadrado de tanto correr y hacer ejercicio! Aunque existe la opción mas natural,la de dejarse llevar… a ver donde nos lleva la corriente… no va a ser un mar en calma, va a ser ¡la hostia de movida!… vas a tragar agua por un tubo pero igual al final del camino, cuando sientas que no puedes más, cuando el aire se haya mezclado con la marea y tus pulmones estén encharcados, en la orilla habrá unos labios que se posen junto a los tuyos y ese boca a boca te devuelva la energía pérdida por el camino, será entonces cuando sientas que valió la pena… te vuelvas a levantar y esta vez cojas una tabla para surfear por esas aguas pero esta vez… sin miedo…
Sin miedo a que te partan por la mitad con un rechazo por tu condición o tu color de piel…sin miedo a que tu personalidad oscura o solitaria asuste al otro… quizá esa otra parte respete tus silencios y tus ganas de estar en soledad. Con suerte te abrazará cuando más lo necesites y sin embargo seas capaz de pedirlo por orgullo o inseguridad.
Ese boca a boca te dará la fuerza de las olas que tragaste, ahí comienza la aventura, una en la que no hay un principio como tal y el final por mucho que digan las cartas o el destino…pues no… ¡no esta escrito!
Se trata de arriesgar. Ese es el secreto. No mirar más allá, tirarse desnudo como aquella mamá nos trajo a la vida, deshacerse de los planes, de los estereotipos, olvidarse del tiempo, de la edad y acordarse sólo del sexo como uso y disfrute del personal… a lo bestia o a lo romántico, como dominante o con total sumisión, al fin y al cabo… todos somos diferentes y para gustos… ¡LOS COLORES!