CASA AJENA
I
Hoy la casa me pertenece, trazo lineas curvas que se deslizan con sútil gracia y delicadeza. Hoy la casa es mía, la flor de loto culmina su ciclo y se expande. Olfateo cada centimetro cuadrado y no huele a nada, no hay aroma peculiar, solo estas finas hojas y vejez.
II
El vapor humeante me hace desdoblar, el vapor brota enrrojeciendo y ablandando mi rostro. Ya no quiero pertenecer a este lugar.