Capitulo 1: “La tormenta”
New York, Abril 5 2017.
Ring, ring, ring!!! Sonó el despertador.
– Parece que es hora de levantarse- dijo Alexander Hole. “Comencemos”, con una actitud positiva tal y como siempre solía ser Alexander Hole despertó como un día cualquiera, se dirigió a la ducha, se vistió y preparó su desayuno favorito, al salir de su departamento de dirigió a su coche, encendió el radio y arrancó.
– Muy buenos días ciudad de New York, parece que el tráfico de hoy estará repleto en la 95, busque vías alternas, en otras noticias tal parece que el clima de hoy se ha vuelto loco, hemos detectado múltiples tormentas que se avecinan a lo largo de la costa, extreme sus precauciones-.
En ese momento Alexander llegó a la carretera 95, tal y como dijo el locutor, estaba a reventar.
-Esto debe de ser una broma- suspiro Alexander, quien solo pensaba en que llegaría tarde a su trabajo como psicólogo en el Hospital st. Angelo, su frustración aumentaba cada vez que escuchaba sonar los claxons de los autos, sin ver qué avanzarán un centímetro. Entonces decidió llamar a alguien para avisar que no llegaría a tiempo.
– Hola Ciza, qué tal, estoy atrapado en el tráfico en la 95, a como veo el pasó con suerte llegaré para las citas de medio día, por favor puedes ayudarme a reagendar las citas, sé que esto no te corresponde como enfermera y se que es robarte tu tiempo, pero ¡¡¡por favor!!!
¿Te recompensare con una cena que dices?-.
Justo del otro lado del teléfono estaba Ciza, como una madre para Alexander, una mujer de unos 50 años, con un rostro un poco arrugado por el tiempo, con unos grandes ojos marrones que con solo mirarlos podías sentir su bondad, una voz dulce que siempre daba tranquilidad a cualquiera que la escuchara, un firme peinado a chongo con su largo cabello negro y su complexión robusta junto a un impecable uniforme blanco de enfermera presentaban a Cecilia Esteves, o como sus amigos la llamaban con afecto “Ciza”.
– ¡Claro que si Alex!, que pregunta vaya, sabes que siempre te ayudaré en lo que pueda muchachito, desde que llegaste a este hospital de he cuidado como si fueras el hijo que nunca tuve, solo apresúrate, pero con mucho cuidado, nos vemos-.
Así con una llamada, Alexander Hole se sintió un poco aliviado, no podía darse el lujo de abandonar a sus pacientes, pues por eso mismo estudió psicología, ayudar a alguien a encontrar su “energía” para enfrentar al mundo, su gran carisma, su delicadeza, su pasión y vocación con su profesión, lo convirtieron en el jefe del departamento de psicología del Hospital st. Angelo, además de su muy agradable perfil, que en palabras humildes del propio Alex, solo se trata de cuidar y mantener sano con dieta y ejercicio, sus ojos marrones, unos delicados rasgos que representan perfectamente el orígen francés de la familia Hole, una voz linda y un cuerpo muy bien cuidado, eso era Alexander Hole.
– Con esto ya estoy más tranquilo, pero espero y no me quedé aquí todo el día, veamos que pasa con esas tormentas que estaban anunciando, espero y no sea nada grave, que bueno que Shira está París con Alisha en su desfile de modas, sus diseños son de los mejores de todo el país, espero y les vaya muy bien a ambas- dijo Alexander, con algo de nostalgia, esperando con ansias volver a ver a Shira.
– ¡Alerta de emergencia! Hemos recibido las últimas noticias de las tormentas en las costas del país, estás tormentas no vienen del mar, vienen del espacio, repito vienen del espacio, la agencia espacial nos ha dicho que no representan peligro alguno, está tormenta llegará no solo a al país, sino a todo el mundo. La tierra será golpeada por una tormenta cósmica en menos de 1 hora, guardemos la calma, pedimos a la ciudadanía que esten aten, aten, aten * señal interrumpida*-.
Alexander comenzó a ponerse nervioso, en toda su vida había escuchado que pasara algo así, de pronto se escuchó un estruendo en el cielo, las personas de la carretera 95 comenzaron a bajar de sus autos para averiguar que pasaba, el cielo comenzó a tornarse oscuro, tal cual la noche, con relámpagos de tonos violeta, verde, azules, magenta y un amplia gama de colores, era en verdad un espectáculo maravilloso a la vista, pero solo era eso?Una maravilla que nos había obsequiado el espacio?
De pronto comenzaron a escucharse truenos y la radio se encendió de nuevo.
– A todas las personas que puedan escucharme, el gobernador acaba de emitir un mensaje de emergencia:
” Le pido a toda la ciudadanía, guarde refugio mientras pasa la tormenta, desconocemos los efectos que esta puede provocar, esto no es un simulacro, repito esto no es un simulacro”-
La alarma de emergencia comenzó a sonar y los estruendos se hacían cada vez más fuertes, las personas intentaban salir de la carretera, pero esta era imposible, de pronto una explosión pudo ser observada en el cielo y una onda expansiva comenzó a bajar hacia el planeta, comenzó el pánico al querer escapar de los alcances de esta tormenta.
– ¡Mierda! Debo salir de aquí, esperó y Shira y Alisha estén bien, ohhhhhh Ciza, debo avisarle que se cuide…
¡Rayos no tengo señal!
Ohhhhhh noooooo-.
De pronto la onda llegó a la superficie terrestre y golpeó a todo el planeta, hasta el más recóndito lugar de la tierra había sucumbido ante el poder de la ” Tormenta cósmica”
Alexander fue golpeado por la expansión y salió proyectado fuera de la carretera, en el hospital lo mismo sucedió, Ciza estaba con sus pacientes cuando la onda llegó y golpeó a todos y cada uno de ellos, en el desfile de modas de Alisha Future y Shira Kyle sucedió lo mismo, una onda expansiva consecuencia de la tormenta golpeó a las mujeres tirandolas del escenario.
Alexander quedó inconsciente a un lado de la carretera, mientras veía la tormenta que había azotado al planeta.