Mi pequeña morrocoya

Mi pequeña morrocoya

Oh, pequeña morrocoya

caminadora de pasto

silbadora de nariz

¿qué es lo que piensas, preciosa?

 

Con esa cabecita coronada de oro negro.

tu suave andar en las baldosas

sobre esas patitas que me encantan,

las cuales con mi toque

hacen que en tu casa entres.

 

Cuando tu barbilla acaricio

con el dorso de un dedo,

te quedas en la luna

sumiendo tus dos oscuros ojos

en un brillo de supernova,

estirando tu largo cuello

con las arrugas desapareciendo

y queriendo llegar a la punta de mi nariz.

 

Pero

¿en qué piensas, pequeña morrocoya?

Mi precioso tesoro

que cabía en mi mano

y dormías sobre mis senos.

 

Respiras soplidos de vida

por esos lindos agujeritos

haciéndome mil cosquillas.

Tu cara siempre es seria

¿Qué puedo hacer para ganarme tu sonrisa?

¿Eh, mi preciosa?

 

Incluso con tu andar en el jardín

aplanando todo bajo tu peso

creando tu propio camino

transformándote en otro ser

uno más mortífero y rastrero

solo en la vista de la lejanía.

 

Pero

¿en qué piensas, pequeña morrocoya?

¿En un mundo incoloro?

¿En tus mininos los gatos?

¿O en las golosinas de las flores?

Oh, mi pequeña princesa

te recitaré todos los días

un beso en tu cabecita

y un muy buen día.




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