MUJERES
Esas malditas locas a las que tanto amo,
Las que me vuelven loco
Pero no en el buen modo.
Me vuelven loco con su personalidad tan indiferente,
Con su amor tan empalagoso
Y sus celos enfermizos
Pero aun así las amo,
Las amo a todas
Pero no soy mujeriego
Sino todo lo contrario,
Llego a ser muy tímido al principio
Pero una vez que tomo confianza, todo cambia.
Me gusta prestarles atención,
Escuchar sobre su vida,
Sus problemas
Y trato de ayudarlas con ellos,
Me gusta llenarlas de cumplidos
Y decirles algunos “poemas de albañil”
Así, un tanto vulgares pero inofensivos.
Soy de los raros que prefieren desnudarles el alma antes que el cuerpo
Porque curiosamente, así son ellas las que terminan quitándose la ropa
Pero aclaro que no lo hago con ese fin,
Honestamente nunca ha sido una prioridad llevarlas hasta ese punto,
Mi prioridad siempre ha sido otra,
Es hacer que la insegura de sienta hermosa
Y que la cabrona ablande aunque sea un poco su corazón.
Pero al final acabo entre sus brazos y su pecho
O entre botellas.
